Santigo Calatrava es uno de los arquitectos contemporáneos que dejan su huella profesional en el paisaje actual de nuestras urbes. Reconocido hace unos días por el Instituto Politécnico Nacional con el grado de Doctor Honoris Causa, Calatrava presentó ante autoridades y alumnos del Instituto, una selección de sus obras más representativas el pasado 10 de octubre, en el auditorio Jaime Torres Bodet de Zacatenco.
Puentes, museos, torres, pabellones, espacios académicos y culturales, así como estaciones integraron la muestra del Doctor, quien durante su intervención, mencionó que para él no existe gran diferencia entre la arquitectura y la ingeniería, pues “todo obedece al arte de construir”. Habló de los retos y la inventiva necesarios para resolver proyectos de diversas escalas, al tiempo que mostraba sus clásicos: El puente peatonal del Campo Volantín, o la expo de Sevilla. También habló de la Ciudad de las Artes y las Ciencias en Valencia y la torre de Montjuic, entre otros.
Respecto al futuro, su propuesta arquitectónica sigue en la búsqueda de lo monumental, así lo hizo evidente cuando presentó la Torre de Observación de Dubai, que busca ser el mirador más alto del mundo; o el recientemente inaugurado Museo del Mañana, en Brasil. Concluyó invitando a los alumnos a no perder las costumbre de dibujar, mientras trazaba un dibujo con la leyenda «Al Poli Mexicano con gratitud».
Santiago Calatrava estudió en la Universidad Politécnica de Valencia, y es ingeniero civil por el Instituto Federal de Tecnología de Zúrich, donde obtuvo el Doctorado en Ciencias Técnicas. Cuenta con más de 20 doctorados Honoris Causa, así como los premios Príncipe de Asturias de las Artes en 1999, el Premio Nacional de Arquitectura de España en 2015, y el Premio Europeo de Arquitectura en 2015.