Particularmente en espacios laborales donde con frecuencia se deben realizar tareas sin errores, de forma eficaz y de modo confortable, una de las variables que pueden afectar el aprovechamiento de los usuarios es la el continuo y molesto efecto de deslumbramiento. Para estos casos existen diversos métodos para reducirlo, siendo la solución más práctica elegir luminarias con clasificación UGR <19, pero, ¿exactamente a qué se refiere este índice?
El UGR (Unified Glare Rating) o también conocido como Índice de Deslumbramiento Unificado, es un valor que expresa el deslumbramiento sometido al ojo humano provocado por una fuente de luz, siendo nulo cuando su valor equivale a 10 y gradualmente mayor cuando este va en aumento, de hecho, todo lo que se encuentre por encima de este valor, puede generar incomodidad.
De acuerdo con la CIE, esta tabulación se originó con el propósito de unificar los diferentes métodos de evaluación del deslumbramiento que existían en los diferentes regiones, definiéndose finalmente en una escala de 10 a 30.
Los efectos que originan el deslumbramiento pueden ser de tipo perturbador, el cual es fácilmente cuantificable, mientras que el deslumbramiento molesto, suele ser más subjetivo y no necesariamente impide la visión de los objetos. Entre sus causas se encuentran:
- Las características técnicas y constructivas de la propia luminaria.
- El nivel de reflectancia de ciertos materiales del entorno como el suelo, paredes, techo, etc.).
- Una mala elección en la ubicación de las luminarias al no tomar en cuenta la altura y su posición respecto al observador ya que cuanto más lejos se encuentre la fuente en la línea de visión, menor deslumbramiento produce.
- El contraste entre la luminancia de la fuente de luz y la de sus alrededores.
Cabe señalar que el valor UGR no es realmente una propiedad de las luminarias, aunque en ocasiones se puede encontrar el concepto en las hojas de datos de los fabricantes. Generalmente esta cifra se refiere al valor UGR que tendría la luminaria en una situación hipotética dentro de una habitación de rectangular con grados de reflectancia del piso al 20%, 50% para paredes y 70% para el techo. Por lo que se debe contemplar que en situaciones reales, este valor puede variar.
Otra variable importante que se debe considerar para evitar la incidencia de este efecto es la calidad del diseño de iluminación para que sea lo más adecuado al entorno. En tal caso, mientras los diseñadores realizan el estudio previo del espacio, pueden medir el posible deslumbramiento a través del método de tabulación de UGR, así como evitar cristales opalescentes o emplear difusores prismáticos para reducir el deslumbramiento.
Otro detalle importante a considerar es que no es posible calcularlo para luminarias asimétricas, orientables, montadas a una altura inferior a la del ojo o montadas en la pared, pues el método tabular no reconoce un ángulo de visión diagonal al eje de la luminaria y se basa exclusivamente en geometrías de habitaciones rectangulares. Este método debe aplicarse a cada tipo individual de luminaria.
Otras sugerencias prácticas para reducir el deslumbramiento pueden ser:
Hoy en día también existen simuladores para generar distintos escenarios a la hora de desarrollar un proyecto de iluminación. Aunque finalmente es importante asesorarse con un diseñador profesional de iluminación para contar con los parámetros necesarios que les permitan diseñar ambientes libres de deslumbramiento que mejoren en gran medida la calidad laboral.
FUENTES
No glare from artificial light. What is behind the UGR method?