Con información de Chauvet Professional y fotografías de Jonathan Atkin para Cunard
Con luces intensas que se elevan hacia el cielo nocturno, el Queen Mary 2 se despidió de Nueva York navegando hacia el final de su gira conmemorativa. El viaje comenzó en Liverpool el 04 de julio, haciendo escala en Halifax, Canadá; pasó por Boston y terminó en el puerto de Nueva York diez días después, entre música, luces y fuegos artificiales.
Quantum Theatricals junto con Chauvet Professional crearon el espectáculo “Ballet de Luz y Música” en el Queen Mary 2. La propuesta de Kelly Easterling, director creativo y diseñador principal de Quantum es un espectáculo de luces dinámicas sincronizado con la música que emerge de las cubiertas del barco y en tierra en el “Battery Park”. Para esto se colocaron en el navío 50 cabezas robóticas “Legend 230SR” de Chauvet, que emiten 96.000 lux a 15 metros, gracias a una lámpara de 230 watts de Osram.
La intensidad lumínica de las lámparas fue tan alta que la FAA y el aeropuerto JFK autorizaron el espectáculo y se les notificaron los tiempos precisos de inicio y término del mismo para evitar afectar al tráfico aéreo.
La coordinación de la música en tierra con la de la nave y las luces, requirió que los diseñadores encargaran un sistema GPS personalizado que activó el inicio del espectáculo tanto en tierra como a bordo del buque en el mismo momento. Un reloj envió la señal que sirve como disparador para las consolas de control de la nave y en el parque al mismo tiempo, con lo que se logró sincronía perfecta entre la iluminación y la banda sonora.
Con este espectáculo la línea de cruceros Cunard da por terminada la gira conmemorativa y regresa su icónico barco a puerto para seguir consintiendo a sus pasajeros en los viajes trasatlánticos más solicitados del mundo.